Eficiencia energética

La ineficiencia del parque inmobiliario español

Las viviendas consumen en España el 17% de toda la energía del país y las emisiones de gases de efecto invernadero causadas por los edificios han crecido más de un 20% desde 1990. El 60% de las viviendas están construidas sin ninguna normativa mínima de eficiencia energética.

Rehabilitación energética, la solución

 
Existen varias razones por las que la rehabilitación de las viviendas existentes debe ser prioritaria en España:
_Porque el parque español de viviendas está sobredimensionado.
_Porque el mayor consumo energético asociado a la edificación se debe al uso de los edificios, siendo posible reducir este consumo mediante la ejecución de actuaciones sobre el edificio.

_Porque el coste energético de fabricación de los edificios supone el segundo mayor consumo energético, lo que hace necesario alargar la vida útil de los mismos.

La rehabilitación resulta un ejercicio más sostenible que la ejecución de obra nueva, porque consume menos recursos naturales, menos energía y menos agua, a la vez que genera menos residuos. Además ayuda a mejorar el funcionamiento de las ciudades, al poner de nuevo en valor las zonas urbanas ya consolidadas y al evitar el tener que ejecutar nuevas infraestructuras. En España además contamos con un parque de viviendas sobredimensionado, debido principalmente al boom de la construcción que hemos vivido durante los años anteriores a la crisis, razón de más para evitar, en lo posible, la realización de nuevas construcciones.
Por otro lado, la actual situación de crisis tanto económica como medioambiental, el incremento continuado del precio de la energía, la amenaza del agotamiento de parte de los recursos energéticos, y la dependencia energética exterior de España nos obligan a replantearnos el modo en que hacemos las cosas.
La gran antigüedad del parque edificatorio español, el gran derroche energético que se deriva de las condiciones constructivas en que se encuentran nuestras viviendas y los resultados obtenidos a partir de diversos trabajos que demuestran los ahorros tanto económicos como energéticos que se obtendrían gracias a la mejora tanto de la envolvente como de las instalaciones de nuestros edificios nos invitan, nuevamente, a plantearnos la rehabilitación como una posibilidad necesaria si queremos llegar a cumplir el marco normativo que se nos impone desde Europa, y que poco a poco y con gran esfuerzo va implantándose en España.

El impulso a la rehabilitación ayudaría además a que muchas familias ahorrasen importantes sumas de dinero en la denominada “hipoteca energética”; a la vez que serviría para crear nuevos puestos de trabajo impulsando así la economía del país y mejorando la situación social actual.